Sequía y agricultura, «no podemos seguir haciendo las cosas como hasta ahora»
El IRTA presenta a las autoridades de las Tierras de Lleida y Pirineos los proyectos de investigación e innovación en los que trabaja para estudiar los efectos de la sequía y mitigarlos, y alerta de que hay que realizar cambios porque la situación, si no, será «inviable»
Se trabaja en la recuperación de cultivos de cereales huérfanos como la cebada pelada, en la búsqueda de nuevas variedades, portainjertos adaptados a la sequía y eficientes en el uso del agua, nuevas estrategias de riego y en la digitalización de la agricultura, entre otros
Durante las olas de calor, la demanda del agua de riego se ha incrementado un 25%, ha afirmado Joan Girona, delegado institucional del IRTA en las Tierras de Lleida y Pirineos e investigador del programa Uso eficiente del agua en agricultura
En mayo se registraron temperaturas de 35ºC varios días, y en julio y agosto vivimos varias olas de calor. Las previsiones climáticas apuntan a que «situaciones como ésta no serán una excepcionalidad, sino más frecuentes», y esto hay que añadir que «no llueve y que la situación de los embalses es dramática». Así lo ha afirmado Joan Girona, delegado del IRTA las Tierras de Lleida y Pirineo e investigador del programa de investigación Uso eficiente del agua en agricultura, en un encuentro del IRTA con los representantes de las principales instituciones de este territorio y que ha tenido lugar en el Fruitcentre esta mañana. En el encuentro, el delegado del IRTA ha radiografiado brevemente los efectos de la sequía y las oleadas de calor en los cultivos: en Lleida, los de regadío han necesitado un 14% más de agua de riego que la media de los últimos cinco años para garantizar las producciones, y durante las olas de calor, la demanda del agua de riego se ha incrementado un 25%. Acto seguido, ha presentado algunas de las iniciativas que el IRTA tiene en marcha para contribuir a mitigar sus efectos, y ha señalado que esta situación «no implica que debamos cambiar los cultivos; la clave es introducir cambios en cómo producimos nuestros alimentos porque no podemos seguir haciendo las cosas como hasta ahora».
Entre las iniciativas de las que ha hablado hay proyectos como el CROPDIVA, que quiere recuperar cultivos huérfanos como la cebada pelada, el trigo sarraceno o el triticale, para favorecer la biodiversidad, contribuir a fijar nitrógeno en el suelo y hacer un uso más eficiente de agua. También se aplican estrategias de riego deficitario en los árboles frutales para estudiar en qué momentos puede reducirse la aportación de agua a los cultivos o cuánto tiempo puede dejarse sufrir un árbol. El otro pilar para conseguir la eficiencia en el uso del agua es la digitalización y reducción de la brecha digital en el ámbito agroalimentario; en este sentido, se ha creado un kit tecnológico que incluye sensores de Internet de las cosas, teledetección, simulación de cultivos e inteligencia artificial, y que permite simular, en tiempo real, la demanda de agua para miles de parcelas.
El encuentro es la 4ª Mesa institucional del IRTA en las Tierras de Lleida y Pirineo, y tiene el objetivo de acercar la actividad del IRTA a los agentes clave del territorio y recoger sus necesidades e inquietudes en materia de investigación e innovación. En el encuentro de hoy asistieron, entre otros, Bernat Solé, delegado territorial del Gobierno de la Generalitat en Lleida; Ferran de Noguera, director de los Servicios Territoriales del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural (DACC) en Lérida; Ramon Alturo, director de los Servicios Territoriales de Economía y Hacienda de Lleida; Dolors Tella, directora de los Servicios Territoriales de la Vicepresidencia y de Políticas Digitales y Territorio en Lleida; Oriol Oró, director de Feria de Lleida; Jaume Saltó, presidente de la Cámara de Comercio de Lleida, y los alcaldes de Mollerussa y Alcarràs, Marc Solsona y Jordi Janés, respectivamente.
