Se han puesto en valor las colaboraciones que permiten trasladar la innovación varietal, el manejo agronómico y la sanidad vegetal al sector productivo
La Finca de la Pujada de IRTA, en Les Borges Blanques, ha acogido hoy la XVII Jornada del almendro, una cita consolidada para el sector que este año ha querido poner el foco en el papel clave de la colaboración entre investigación pública y sector privado. La edición de este año ha girado en torno a las alianzas que hacen posible transformar el conocimiento científico en soluciones prácticas para un cultivo estratégico como es el almendro.
Durante la jornada, los asistentes han podido conocer de cerca diferentes líneas de investigación y proyectos experimentales que se llevan a cabo con la participación activa de empresas del sector. El objetivo compartido es avanzar hacia un modelo de producción más eficiente, rentable y sostenible.
El programa se ha estructurado en diferentes estaciones temáticas que han permitido mostrar, en grupos reducidos, casos concretos de innovación aplicada. Se han presentado una nueva variedad y un nuevo portainjerto desarrollados por el IRTA, Divina e Intensia; el programa de mejora genética en colaboración con Unió Nuts; los Grupos Operativos como herramientas para abordar el control de enfermedades; y los requisitos industriales en el procesado de la almendra. También se han expuesto ensayos en manejo ecológico y proyectos de experimentación contractual en productos fitosanitarios.
Esta jornada técnica es un buen ejemplo de cómo la investigación puede convertirse en motor de innovación cuando trabaja alineada con las necesidades reales del sector. En este sentido, el IRTA reafirma su compromiso con una investigación orientada a la transferencia y la mejora continua del sector agroalimentario catalán.