El objetivo ha sido compartir estrategias de adaptación a los efectos del cambio climático.
El IRTA ha participado activamente en la feria “Territorio y Resiliencia: Feria de buenas prácticas agrarias y forestales”, celebrada los días 16 y 17 de mayo en el Cava Centre de Sant Sadurní d’Anoia. Este encuentro ha sido un espacio de sinergias entre proyectos como Life eCOadapt50 y ResAlliance, que comparten el objetivo común de impulsar la adaptación territorial a los crecientes efectos del cambio climático.
El sábado, Anna Palli, jefa de las oficinas de Vigilancia Tecnológica y Garantía de la Calidad del IRTA, inauguró la jornada como keynote speaker con una charla introductoria sobre los conceptos de innovación transformadora. En su intervención, planteó una reflexión crítica sobre los sistemas alimentarios actuales y la necesidad de transformarlos para operar dentro de los límites planetarios. También reflexionó sobre otros límites menos visibles, como los marcos mentales o el modelo socioeconómico desde el que se intenta abordar los retos climáticos. Finalmente, puso en valor las iniciativas locales que ya se están llevando a cabo y que, conectadas, pueden generar puntos de inflexión hacia sistemas agroalimentarios más justos y sostenibles.
Life eCOadapt50 es un proyecto clave en esta transformación. Desde el inicio del proyecto, se han constituido dieciséis Living Labs con la implicación de más de 400 actores sociales y económicos locales. A través de estos espacios se ha diagnosticado la vulnerabilidad climática de los territorios participantes y se han comenzado a desplegar más de 70 acciones de adaptación en sectores como el forestal, el agroganadero, el turístico y el alimentario. El IRTA participa aportando conocimiento científico y técnico para la definición y ejecución de varias de estas acciones, especialmente en el ámbito de la sostenibilidad agroalimentaria.
La feria ha sido un punto de encuentro entre promotores de 38 prácticas innovadoras y un centenar de participantes, con representación de la administración pública, la investigación, la empresa y la sociedad civil. Esta diversidad ha permitido establecer puentes entre actores y disciplinas para avanzar hacia un territorio más resiliente frente a las sequías y los incendios forestales, dos de los impactos climáticos más severos en el Mediterráneo.
La participación del IRTA en jornadas como esta refleja su compromiso con la transición agroecológica y con el acompañamiento a los territorios en el camino hacia una adaptación real, justa y efectiva al cambio climático.
Jefe de las oficinas de Vigilancia Tecnológica y Garantía de la Calidad