Las variedades de manzana y pera adaptadas a climas cálidos y desarrolladas por el IRTA y Fruit Futur se preparan para salir al mercado
Las variedades son el resultado de un programa internacional de mejora genética varietal entre el IRTA, Fruit Futur y los socios de Nueva Zelanda Plant & Food Research para dar respuesta a los retos del cambio climático
Turners and Growers (T&G) será la empresa licenciataria a nivel mundial
La presentación del programa ha tenido lugar el 6 de febrero en la feria internacional Fruit Logistica de Berlín
El IRTA, Fruit Futur y Plant & Food Research, propietarios del programa de mejora genética para la mejora varietal de manzanas y peras han firmado un acuerdo con el líder global de producción y comercialización de fruta T&G Global para comercializar y continuar desarrollando nuevas variedades de manzana y pera adaptadas a climas cálidos. Las principales características de las variedades son la calidad excelente y una alta coloración en condiciones de altas temperaturas y escasez de agua.
Después de un trabajo conjunto de más de 15 años entre los socios del programa internacional para el desarrollo de las variedades, la presentación oficial de esta alianza con T&G ha tenido lugar este miércoles 6 de febrero en la feria internacional Fruit Logística en Berlín (Stand T&G Pavellón 6.2 /C-17). Los socios del programa han confiado en la experiencia de un socio comercial como T&G para hacerlas llegar a los mercados y productores de todo el mundo.
En el acto de presentación han intervenido la H. Sra. Teresa Jordà, consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat de Cataluña; Josep Usall Rodié, director general del IRTA; Gavin Ross, Group General Manager, Marketing & Innovation de Plant & Food Research; y Sarah McCormack, T&G Director of Apples & Pears.
El programa varietal utiliza contribuciones de germoplasma tanto de Nueva Zelanda como de España para identificar padres con las características clave que se requieren para el cambio climático: alta tolerancia a la temperatura, bajo requerimiento de agua y frutas de alta coloración, buena textura y excelente sabor y conservación. También hay un claro enfoque hacia la mejora en la resistencia a las plagas y enfermedades de importancia en climas cálidos. La adaptación de los cultivos a las condiciones ambientales del cambio climático es actualmente uno de los principales retos que debe afrontar el sector y nuestra sociedad para garantizar una producción competitiva y sostenible de alimentos saludables.
La historia del programa
El Hot Climate Programme (HCP) lo iniciaron el IRTA y Plant & Food Research el año 2002 con el objetivo de desarrollar nuevas variedades de manzana y peras adaptadas a zonas de cultivo con altas temperaturas.
En ese momento, los productores de la península ibérica, y concretamente de Cataluña, ya empezaron a experimentar problemas con las variedades tradicionales a causa del aumento de las temperaturas: menor coloración roja, quemaduras solares, texturas de pulpa blanda y una incidencia más alta en los trastornos de almacenaje.
Ambas instituciones empezaron a trabajar juntas en este programa al ver que este problema se extendería a otras regiones a medida que fuera aumentando la temperatura a causa del cambio climático y que, por lo tanto, la demanda de variedades desarrolladas para estos entornos sería creciente en todo el mundo.
El 2003, Fruit Futur, una agrupación de interés económico formada por Actel, Fruits de Ponent, Nufri, Poma de Girona y el IRTA, se unió al proyecto como experto en la producción comercial de manzanas y peras en Cataluña y potencial interesado en estas variedades. Su esperteza y profundo conocimiento comercial han sido clave en el desarrollo y la evaluación de las selecciones del programa de nuevas variedades.
Finalmente, en 2018 los propietarios del programa escogieron T&G Global, responsable de proyectos tan exitosos en el desarrollo de fruta a escala global como son Envy®, Jazz® o Pacific Rose®, para comercializar a nivel internacional las nuevas variedades del programa. Estas variedades empezarán a llegar a los mercados en los próximos años y supondrán un revulsivo para incrementar el consumo de fruta.