FIRE-RES, un proyecto para construir una Europa más resistente a los incendios forestales extremos
Una gran red de expertos internacionales establecerá pautas de prevención y extinción de incendios durante los próximos cuatro años, en el marco del Green Deal de la Unión Europea
Cuenta con la participación de más de 35 entidades de Europa, Chile y Estados Unidos para implementar paisajes y comunidades cada vez más resistentes y resilientes a los incendios forestales acentuados por el cambio climático
Las zonas afectadas por la sequía y el aumento de las temperaturas están experimentando incendios que baten records en términos de superficie quemada, velocidad de la propagación del fuego y comportamiento de los incendios. Además, los expertos apuntan que en unos años las zonas que aún no se han afectado serán regiones propensas al fuego. Por este motivo, la Comisión Europea está invirtiendo grandes recursos para elaborar nuevos modelos y enfoques que aborden este problema. El diciembre de 2021 se inició el proyecto FIRE-RES “Tecnologías innovadoras y soluciones sociales, ecológicas y económicas para los territorios resilientes al fuego en Europa”, para conseguir que Europa sea resiliente delante de los eventos extremos de incendios forestales y diseñar estrategias y herramientas de gestión de emergencias adecuadas para mejorar la gobernanza y la comunicación de la consciencia del riesgo. El proyecto está liderado por el Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Catalunya (CTFC) y cuenta con más de 30 socios de diferentes regiones de Europa.
A lo largo de cuatro años se propondrán diferentes acciones innovadoras para comprender mejor el comportamiento y las causas de los incendios forestales extremos, que impacto tienen en el paisaje, en la economía y en las comunidades locales, contribuyendo así a lograr los objetivos de la Unión Europea para el 2030. Para hacerlo, estas acciones se llevarán a cabo en 11 escenarios diferentes llamados Living Labs, en la Nueva Aquitania (Francia), Bulgaria, Islas Canarias (España), Catalunya (España), Galicia (España), Alemania-Países Bajos, Grecia, Noruega-Suecia, Portugal, Cerdeña (Italia) y Chile. Cada uno de ellos contará con colaboraciones entre el sector público, comunidades científicas, empresas privadas y asociaciones ciudadanas.
El CFTC contará con la participación de investigadores del programa de Fruticultura del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) para completar el conocimiento sobre la materia vegetal y las prácticas agronómicas de los cultivos leñosos. «El cultivo de árboles fruteros entre medio de zonas boscosas puede jugar un papel clave en el mosaico del paisaje para prevenir los incendios y la recuperación después del fuego», constata la investigadora Felicidad de Herralde. Por eso, en el área de estudio designada como Living Lab Catalonia, estudiaran la viabilidad de cultivar viña y manzano, tomándolos como modelo, para obtener guías de buenas prácticas y estudiar su coste del cultivo para obtener una producción sostenible y eficiente en áreas vulnerables. El resto del equipo de investigadores del IRTA implicados en el proyecto son Luís Asín, Jaume Lordan, M Peris e Immaculada Funes.
FIRE-RES ha recibido 19,8 millones de euros de financiamiento del programa europeo de investigación e innovación Horizon 2020.
Web del proyecto: https://fire-res.eu/