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18/02/2022

Veinte investigadoras del IRTA participan en la edición 2022 de #100tífiques

Georgina Alins en una escuela.

Un año más, el IRTA ha celebrado el Día Mundial de la Mujer y la Niña en la ciencia con sus investigadoras a diferentes centros escolares de Cataluña.

Esta ha sido la cuarta edición de #100tífiques, una iniciativa de la Fundación Catalana para la Investigación y la Innovación (FCRI) y el Barcelona Institute for Science and Technology (BIST).

Cada 11 de febrero la ciencia se vista de lila para reivindicar y visibilizar las mujeres que se dedican a la investigación. Entre todas las actividades que se organizan, #100tífiques coordina diferentes charlas simultaneas a escuelas y centros de secundaria de Cataluña, hechas a cargo de investigadoras de todas las edades y de todos los centros de investigación catalanes. Es un rato para compartir sus experiencias profesionales al alumnado y contar a los niños y a los jóvenes como es el día a día de una científica. ¡A continuación recogemos algunas experiencias de nuestras científicas!


Estimular con la experimentación

¡Algunas tuvieron la suerte de poder hacer su charla en un teatro! es el caso de Begonya Marcos, del `programa de Calidad y tecnologías alimentarias, hizo su charla al alumnado de 1ero de la ESO del Instituto de Celrà. La charla de Begonya formaba parte de un puñado de actividades que llevaron a cabo en la escuela para conmemorar este día, tal y como comentan en la web del centro. «Les expliqué la investigación que hacemos en el IRTA de Monells y mi línea sobre los envases alimentarios. También les hice un pequeño experimento para enseñarles como extraer micro plásticos del agua de manera muy sencilla. Y lo más curioso, que el experimento no lo ideó ningún gran científico, sino un chico de sólo 18 años», explicaba la investigadora.

Begonya Marcos.

Algunas virtuales, per muy cerca

Este año aún no se han podido hacer todas las charlas con normalidad. Aunque la mayoría las hicieron presenciales, muchas investigadoras las hicieron en formato virtual dependiendo de la situación de cada centro. Patricia Prado, investigadora del programa de Aguas marinas y continentales, también hizo la charla en formato virtual, en su caso a tres clases del alumnado de 3ero de la ESO del Instituto de Tecnificación de Amposta. Ella, pero, decidió ir al centro unos días antes y llevarles trípticos y adhesivos de su proyecto de conservación de la nacra en el Delta. «El día de la charla todo el alumnado estaba muy motivado para conocer más cosas sobre esta especie y eso me gustó mucho!», celebra, contenta, la investigadora. Laura Vilanova, investigadora de Postcosecha, también hizo la charla en formato virtual, pero en su caso a 120 alumnos! Fue en el Instituto Ronda de Lleida. Veamos si el año que viene se puede hacer todo en formato presencial y buscar la interacción cara a cara, ya que las investigadoras tienen muchas ganas!

Montse Martín, del programa de Genómica y biotecnología vegetal, hizo la charla en la Escuela Cor de Roure de Santa Coloma de Queralt. «Me hubiera gustado hacerla en persona porque es mucho más divertido, pero de todas maneras les ha gustado mucho mi charla y me han aplaudido mucho. ¡Son tan bonitos, los niños!».

Rosario Torres, investigadora del programa de Postcosecha, hizo su charla al alumnado de 1ero i 2ndo de la ESO del Instituto Escola Baldomer Solà de Badalona. Lo explicaron en su cuenta de Instagram.

La Sílvia Fornalé, investigadora del programa de Genómica y biotecnologia vegetal, dio la charla en una clase de 6º de Prats del Lluçanès. «Los niños y las niñas estuvieron muy participativos y se habían preparado bastantes preguntas. En la primera parte de la charla me presenté como mujer científica y expliqué cómo decidí dedicarme a la ciencia. También les expliqué lo que hago en mi tiempo libre. Después, hablé de lo que hacemos en nuestro programa de investigación para mejorar la calidad de escape y de plantas de interés farmacéutico». ¡Veamos si el año que viene se puede hacer todo en formato presencial y buscar la interacción cara a cara, ya que las investigadoras tienen muchas ganas!

La Sílvia fent la xerrada virtual.

Escuelas rurales, también con la ciencia

En #100tífiques también han participado escuelas rurales, como el caso de la Escuela la Gessera, en Arnes, donde se desplazó Emma Fàbrega, investigadora de Bienestar animal. «Ha sido toda una experiencia ir a una escuela tan pequeña, con solo ocho alumnos de diferentes edades. Llevé una cámara termográfica, una herramienta que utilizamos para mirar patrones de temperatura en los animales, y se lo pasaron muy bien haciendo su propia imagen».

Emma Fàbrega.

Judit Guitart, estudiante de doctorado del programa de Sanidad animal, participó por primera vez en #100tífiques y dice que ya tiene ganas de volver el año que viene. Describe su experiencia así: «Me tocó hacer la charla en el Instituto Escola Corbatera, en Cornudella de Montsant. Entre los cursos de sexto de primaria y 1ero de la ESO había un total de 22 alumnos, cosa que me hizo pensar que seria poco interactivo o que tendrían pocas preguntas. Lejos de todo eso, la experiencia fue maravillosa. Pude responder todas las preguntas que tenían todas las niñas y niños, pudimos hacer una charla muy dinámica e interactiva, además de poder conocer una escuela muy familiar y un pueblo con mucho encanto. Me quedo sobre todo con el momento antes de irme, cuando les repetí la pregunta que les había hecho al principio sobre a cuantas de ellas les interesaba la ciencia, ¡muchas más y con más convencimiento levantaron la mano!».

Marta Cerdà, investigadora también del programa de Sanidad animal, se desplazó a la escuela rural Zer Berguedà Centre (Vilada y Borredà). Trajo unas placas de Petri para que el alumnado viera cómo se trabaja con bacterias en el laboratorio e hicieron un pequeño experimento para ver los microorganismos que tenemos en las manos y la importancia de lavarnos. «Miramos microbios un poco de por todas partes, en las manos sucias en comparación con las manos limpias, en la boca, en el suelo del aula, en la suela del zapato y sobre la mesa. También les traje placas con medios de cultivo de diferentes colores para que pudieran tocar y remover, y alguna placa bien sellada, para que vieran el aspecto del crecimiento bacteriano en estos medios y como en función del color del crecimiento, ayuda a hacer la identificación bacteriana». Marta lleva 3 años participando en #100tíficas y dice que su kit de demostración del método científico siempre tiene mucho éxito!


Ser científica, una profesión única

Acercarse a los niños para que conozcan la profesión de científica como cualquier otra es aún una asignatura pendiente. Míriam Cerrillo, del programa de Sostenibilidad en biosistemas, fue a Sant Julià de Vilatorta a contar su carrera científica al alumnado de sexto de la Escuela Bellpuig. Míriam les explicó que investiga como hacer que los purines no contaminen tanto y también como trabajan para mejorar el bienestar animal. ¡Se les ve bien contentes en esta noticia en la web del centro!

Míriam Cerrillo fent la xerrada.

Maria Casanovas Castro, investigadora del programa de Fruticultura, consiguió transmitir a los alumnos de sexto de primaria de la Escuela Pinyada de Alfarràs. A pesar de ser viernes por la tarde (unas horas complicadas), dice que «estuvieron muy atentos, hicieron muchas preguntas y creo que conseguí que nos vean a la científicas como personas “normales”, con vidas y faenas “normales”, y que no somos personas raras ni tampoco ratas de laboratorio, que no salimos nunca de la cueva». Explica que pudieron ver la utilidad de su investigación en el día a día de todos y todas, con ejemplos prácticos, y eso les gustó mucho.

Georgina Alins, del programa de Fruticultura, hizo la charla en la Escuela Comptes de Torregrossa de Alcarràs. Ella centró la charla explicando la investigación que hace en el estudio de los insectos beneficiosos para la agricultura, y de la importancia de la biodiversidad. En este caso, el alumnado ya tenía preparado previamente en el aula algunas preguntas, como que haría el planeta sin los insectos o que función tienen estos animales. Tal y como cuentan las niñas y los niños en una noticia de la web de la escuela, «hemos visto que para dedicarse a la ciencia no hace falta ser especial, que todo el mundo puede utilizar el razonamiento científico y que la ciencia no deja nunca de asombrarnos».

Alicia Manzanares, del programa de Sanidad Animal, explicó la investigación que hace con la bacteria Campylobacter en el Instituto Manuel Vazques Montalbán, en Sant Adrià del Besós, ¡con un toque influencer! Alicia siempre participa en todas las actividades posibles de divulgación y que acerquen la ciencia a los niños, jóvenes y adultos. Lo publicó en su cuenta de Instagram @alice.sciene


Conectar con los niños y las niñas

Un año más IRTA celebra la participación de sus científicas en esta actividad simultanea en todo Cataluña. Algunas ya piensan en repetir la actividad, como Laura Bonillo, del programa de Sanidad animal. «Lo disfruté mucho y los niños y las niñas me parecieron muy curiosos y muy atentos. De hecho, no pensaba que estuvieran tan interesados en mí y en el investigación que hago, hasta con preguntas que no me esperaba. Como curiosidad, y entre tantas preguntas que me hicieron, descubrimos que compartía la afición del ballet con un grupo de niñas y eso hizo que conectáramos mucho!». 


Y el camino pera llegar a ser científico o científica, ¿cuál es?

Cristina Zomeño, investigadora del programa de Industrias alimentarias, fue a la escuela FEDAC de Salt. «Mi experiencia ha sido muy positiva y estimulante. La responsable de la actividad, que era la directora de la escuela, se implicó mucho e hizo la actividad que se proponía en la guía didáctica para las escuelas. Respecto a los alumnos (1ero de la ESO), eran muy majos y participaron mucho. De hecho, tuve tantas preguntas durante la charla que casi me quedo sin tiempo para poder explicarles todas las cosas que tenía previstas. Me gustó mucho ver que tenían interés por la ciencia y que algunos de ellos querían ser científicos». Cristina explica que los jóvenes no conocían como es el proceso para llegar a ser científicos y les explicó los pasos que han de seguir poniéndose a ella como ejemplo. Remarca que es muy necesario hacer estas actividades para despertar vocaciones científicas y también sería interesante trabajar conjuntamente con los profesores y psicopedagogas de los institutos y escuelas para que sepan orientar bien a los alumnos y les den a conocer esta salida profesional.